Relatos Eróticos Autosatisfaccion
Sueño húmedo, sueño erótico, sueño de sexo húmedo y erótico | Relatos Eróticos de Autosatisfaccion
Publicado por Andrea el 07/04/2016
Es intrigante el modo en que podemos pensar tanto en el sexo. Quizá es verdad lo que dicen, mientras mas lo pruebas o más experimentes, mas quieres.
Tengo un sueño humedo tan excitante para mi, que quizá cada vez que sueño con eso despierto un poco mojada y bastante excitada.
Suele ser alguien lejano, alguien que conozca de algún otro lugar. Comienza con un "yo ire a verte", viajaba para quedarme en su casa unos días tan sólo para pasar tiempo con él.
Mientras me quedaba en su casa siempre habia gente, su madre, sus hermanas o amigos, asi que nos las arreglabamos para tener uno que otro fajonsito. Era tan rico hacerle un oral, o que me masturbara disimuladamente, era rico aunque no pasabamos de tocarnos o masturbarnos el uno al otro.
Hubo un dia en el que de casualidad el y yo quedamos solos y para aprovechar el momento y las ganas que le tenia, me paseaba una y otra vez por la casa con una falda corta y un esqueleto black sabbath que mostraba mis senos un poco.
Pensaba que el me veía pero cuando lo perdí de vista, entre a su cuarto. No lo veía hasta que de un momento a otro sale del baño, cierra las puertas y en ese instante él me coge contra la pared, me carga y me besa mientras me roza su pene fuertemente. Ya le traía ganas así que al excitarme un poco le pedí que me bajara y lo empuje a su cama en donde me montaba encima de él y suavemente me movia quitándole la chaqueta que llevaba puesta mientras él iba tocando mis senos suavemente coordinandolos con mi movimiento encima de él.
Me bajaba el esqueleto con todo y braciel y empezaba a lamer la punta con tal delicadeza que me empezaba a volver loca. Luego metio el pezón en su boca subcionando totalmente y haciéndome excitar más y más. Yo me paraba de la cama y empiezaba a desvestirme mientras intentaba ser sensual y le bailaba, en lo que el se bajaba el pantalón y se sacaba esa verga que me volvia loca, esa que quería que me penetrara y que no la sacará. En un acto de impulso ya en solo bragas me arrodillaba a hacerle un oral, esforzandome al maximo para meterla toda en mi boca, él agarraba mi cabeza y empiezaba a moverla de arriba para abajo como si disfrutará que se la mamara, yo ya estaba tan mojada. Después de unos minutos me levanta y me acuesta en la cama, y me baja las bragas con rapidez.
Comenzó tocando el clítoris suavemente mientras me besaba y yo lo masturbaba, entonces se le ocurrio bajar lentamente lamiendo mis senos y besando mi abdomen, así lentamente hasta llegar a la vagina, en donde empieza a rozarme la lengua haciendo que yo deseara una buena mamada. Cuando me comenzó a hacer un increíble sexo oral yo empiezaba a gemir a montones pidiéndole a gritos que me penetrara, que me la metiera. No aguantaba más así que intentaba pararme. En ese momento paró y me volteo poniéndome en cuatro, rozandome su pene, masturbandome con ya dos dedos, haciéndome querer más y más. Estaba tan excitada en ese momento, no podía pensar en nada más que su verga dentro de mi.
Segundos después de tanto pedir y gemir por tan rica sesión de masturbación me penetró tan fuerte que pareciera que en realidad lo sintiera (Cada vez que pienso en esta parte me dan ganas de masturbarme). Me la metio todita fue tan rico y mas en cuatro, fue delicioso y sólo podía pedir en medio de gemidos que lo hiciera más fuerte, más rápido, más brutal. A los 10 minutos de estar en esa pose tan rica y excitante, saca el pene y me para, bruscamente me pone contra la pared haciendo que mi culo quedará a su vista, me agarra el cabello y me vuelve a penetrar con su enorme verga. Ese momento fue excitante, ya en medio de gemidos y una follada bien rica el ya iba a eyacular y yo ya habia alcanzado mi orgasmo, así que saco el pene y me arrodillo, inmediatamente comencé a chuparlo de manera tan garosa y descontrolada, disfrutaba tanto hacerle sexo oral!
Cuando ya estaba llegando su momento, le puse mis senos para que eyaculara en ellos, y así fue.
Sólo puedo pensar en su pene, en cómo me tocaba, en cómo me masturbaba. Es el sueño húmedo más rico de mi vida.