Relatos Eróticos Sadomasoquismo
Las lagrimas de Belen
Publicado por Anónimo el 30/11/-0001
Quien ve a Belén por la calle ve a una mujer que tiene un estupendo trasero y unas tetas impresionantes. La mayoría de los tíos que se quedan babeando y sueñan con meterle mano pero a Belén no le gustan los babosos ni los metemanos. A Belén le gusta ser dominada y eso es precisamente lo que hago yo con ella. Mira que le doy caña pero ella siempre quiere más. Algunas veces incluso me provoca.
Hace unos días me fui con ella a una fiesta de la empresa, para los demás ella es mi novia, pues estuvo hablando con el idiota de Pérez de contabilidad, le estuvo enseñando la tetas y poniéndole cachondo. Yo me reía por fuera pero por dentro estaba que ardía de ira. Ella se reía no por los chistes de Pérez que son malísimos sino por que sabia lo que le estaba preparando. Fue llegar a mi casa y le dije - chica dura, no voy a parar contigo hasta que te haga llorar -. Ella va de dura de imperturbable, no se suele inmutar cuando le doy caña pero esta me propuse hacerla llorar.
Lo primero que hice al llegar a la casa que tenemos fue cojerla del cuello por el collar y rasgarle el vestido por la parte del cuello. Aunque ella había tenido fantasías de violaciones lo que le iba a dar ese día iba superar sus expectativas. Fue muy divertido ver su cara de enfado y fue mas divertido ver como cambio a incredulidad cuando le daba la primera bofetada. Acto seguido le rasgue el vestido completamente y se lo metí en la boca para que no se pusiera a chillar y la ate con unas esposas que siempre tengo a mano en casa por si me apetece jugar un rato. Aparte de las esposas y el vestido solo llevaba la ropa interior. Ese día llevaba un conjunto seda color melocotón que se pone de vez en cuando para ponerme cachondo. Y estuve un rato tocándole las tetas y pasándole del dedo por el chochito. Estaba húmedo, chorreante, dejaba mi mano un rastro de líquido. Supe que había llegado el momento de lo bueno y le quite tanto el sujetador como las bragas rompiéndolas. Así me la lleve al cuarto de juegos.
En el cuarto tengo un gancho para atar a la zorra que me lleve de pie y fue en esa donde puse a Belén. Primero empecé por unos azotes flojos para calentarla y luego continué con unos azotes mas fuertes progresivamente hasta que le di unos tan fuertes que empezaron a dejar una pequeña marca, ese fue la señal para empezar a pegar en sitios estratégicos. Yo soy firme partidario de los azotes en el coño y en la cara interior de los muslos. Los azotes los iba alternando con caricias y de vez en cuando le tocaba el coño y cada vez lo notaba mas húmedo que la vez anterior. En ocasiones normales la hubiera desatado y le hubiera permitido masturbarse un poco pero como esta era una ocasión especial decidí masturbarla yo con la mano mientras con la otra mano proseguía azotándola. Creo que se debió de correr varias veces por que yo tuve que secarme la mano.
Tras largo rato ya me había aburrido de azotarla entonces empecé a jugar en su coño con mis dedos. Para estar más cómodo en esta parte del juego me la lleve a una cama en donde la ate a las cuatro patas de la cama. Seguí masturbándola con los dedos pero al rato me ayude de un par de los consoladores enormes que Belén guardaba de su etapa de lesbiana. Se los metí hasta el fondo dureza y lo resistió todo muy bien hasta que se me ocurrió algo que no había hecho antes y fue meterle los dos consoladores a la vez por el culo mientras con la otra mano le metía la mano en el coño hasta al fondo. Se revolvía como una puta pero seguía sin ver en sus ojos lo que quería. Así que proseguí de una forma mas brusca y dándole pellizcos en los labios de la vagina y el clítoris. Hasta que me parecio que aquello estaba quedando asqueroso de tanto flujo vaginal y mierda así que decidí proseguir en una parte mas limpia
Unas tetas me inspiran muchísimo sobre todo chuparlas y estrujarlas. Generalmente me gusta hacer eso y aparte de un cachetazo pero esta vez era especial así que empecé duro. En el cuarto de juegos siempre tengo unas pinzas de metal que compre para estas ocasiones. Esta vez empecé por el cuello y fui bajando por el pecho hasta las tetas poniendo pinzas una tras otra. Pero no rápidamente hay cosas que se deben de hacer con lentitud como el goulash de cordero y pinzar a una puta. Le coloque cerca de treinta pinzas pero las mas satisfactorias de colocar fueron la de los pezones en esas fue especialmente malo y se las puse apretando. A ratos la escuche gemir desde la mordaza pero no tenia en sus ojos los ojos húmedos. Así que le quite las pinzas una a una lentamente, algunas dándole un tirón fuerte. Con esto me estaba poniendo cachondo así que le metí la polla en la boca. Tarde un rato en correrme pero tengo que decir que estuvo largo rato ahogándose con mi polla en su boca.
En ese momento tuve una idea, pensé si que si seguía dándole caña acabaría lesionándola, la muy estupida zorra no daba su brazo a torcer así que se me ocurrió la siguiente estratagema. La puse de pie mientras le pegaba con la fusta, la desate de las manos y le dije - Vale Belén tu has ganado, ya te puedes ir -. Fue muy divertida la expresión de sus ojos de triunfo, luego puso una expresión de sorpresa y por ultimo empezó a llorar cuando se fue al suelo. No le dolió mucho supongo que fue mas la sorpresa y el hecho de ser vencido en el ultimo momento.
Después de esto unos lagrimones empezaron a caer desde los ojos de Belén y eso a mi me pareció muy divertido. Ya se que debería de haber seguido pegándole por ser tan puta pero ya tenia lo que quería en mi mano y lo que quería eran las lagrimas de Belén. La desate y le dije que recogiera todo. Me fui a hacer algo mas importante.