Relatos Eróticos Intercambios
Soy un cornudo feliz
Publicado por Anónimo el 30/11/-0001
Lo más difícil de cualquiera de los relatos es tener que realizar confesiones sobre la intimidad de nuestras relaciones de pareja y créanme que lo pensé mucho tiempo antes de realizar esta narración, primero por lo machista de nuestra sociedad y segundo por miedo a que alguien conocido o familiar pueda relacionar los hechos y descubrir que se trata de nosotros.
La persona que me animo fue mi esposa, ella asegura que para ella es fascinante que hagamos lo que hacemos y que yo tenga el valor de contarlo y me dijo que esto la excitaría muchísimo y que además seria una buena oportunidad para aprender y conocer más personas que compartan nuestros gustos.
Somos una pareja relativamente joven, mi esposa tiene 38 años, mide 1, 65 de estatura, piel trigueña, cabello largo, es trozuda, piernas gruesas y firmes, culoncita y tetoncita sus tetas son 36b y es muy pero muy caliente y complaciente. Yo tengo 40 años, somos colombianos y vivimos en Bogotá
Esta breve reseña para contarles que desde hace unos seis años me empezó una curiosidad enorme por las películas pornográficas en donde habían tríos y grupos donde una mujer tiraba con mas de un hombre y esto me ponía a mil, empecé a llevarlos a casa y verlos junto a mi esposa , a quien en un inicio no le llamaba la atención y se dormía, yo terminaba pajeándome e imaginando que era ella quien se metía dos vergas a la vez.
Empecé por comprarle ropa cada vez más atrevida y a pedirle que intentáramos algunas locuras, tarde casi seis meses en confesarle mi gran fantasía, una noche tomando unos traguitos, vimos una película de un esposo que le pide a su esposa acostarse con otros hombres y ella acepta, me calenté mas de lo normal y mientras le mamaba la raja le dije que yo quería ver como le entraba otra verga en la chocha, ella brinco y continuo contorsionándose, pero no me respondió, cuando terminamos le pregunte que si le gustaba lo del video y que si ella permitiría algo así. Me confeso que hace semanas me había estado poniendo cuidado y que no entendía que pretendía yo con esos videos y las insinuaciones, que si era que ya no la quería.
Continuamos tomando y culiamos una vez más, mientras se lo metía le decía al oído que era muy rica y que ese culote se le debía de ver muy lindo con una buena verga adentro, cuando terminamos ella me dijo que si esto lo hacia por probarla podía estar cometiendo un error y más lanzada me pregunto que si era verdad que quería verla con otro hombre, cuando le conteste que si ella me advirtió que no me creía capaz de permitirlo y remató diciendo que tal que me acostumbre y tu no seas capaz de mantener tu decisión?.
Por algunos meses nuestra actividad sexual se aumento y las fantasías empezaron a crecer, le compre un consolador y culiabamos como si fuera un tercero en nuestra cama, ella empezó a nombrar hombres a veces por petición mía y otras por deseo propio, hasta que por fin decidimos planear como llevaríamos a cabo nuestra fantasía y quien seria la persona para realizarla, decidimos que un amigo mío Lucho, que era además amigo de la casa desde hace muchos años, él es soltero y a Gloria siempre le gusto.
Un día nos tomamos unos tragos con Lucho y hablamos de todo y cuando ya estábamos algo tomados empezamos a hablar de mujeres y sexo, terminamos hablando de los tríos y él manifestó lo mucho que le gustaría comérsele la mujer a otro con su aprobación, ni corto ni perezoso y por efecto del ron y le manifesté que Gloria y yo teníamos la fantasía de meter a otro hombre en la cama, al principio no me tomó en serio y se puso colorado, pero después de un rato de hablar sobre el tema le conté los detalles y el por que habíamos decidido que fuera él quien nos ayudara a realizar nuestro sueño.
Lo invite a casa para tomar algo allí, cuando llegamos Gloria se encontraba sola pues nuestros hijos viajaron por la navidad con mi suegra, ella no sabia que yo llegaría acompañado y menos con Lucho pues no habíamos decidido cuando lo haríamos y la verdad yo tampoco lo hice con la intención de hacerlo ese día, solo quería seguir tomando, pero para mi sorpresa Gloria estaba caliente y se había puesto ligueros y minifalda esperando que tuviéramos sexo los dos esa noche, cuando entramos en la sala ella estaba viendo una película porno y dos hombre le daban verga a una mujer, ella se asusto y apago el televisor y se metió pronto en la habitación.
Lucho me miro con ojitos de picardía, le pedí que se sentara y hable con mi esposa, ya le comente a Lucho y creo que podríamos aprovechar hoy, después de dos horas la convencí de tomar algo con nosotros y continuamos viendo la película, ella no miraba a Lucho, para romper el hielo yo les serví más ron y empecé a hacer comentarios de la película, pronto Lucho por le trago se animo a lanzar uno o dos comentarios mas tímidos, yo no aguante mas y le pedí a Lucho que se sentara en el mueble con nosotros y luego conduje la mano de mi esposa para que sobara la verga de Lucho y allí empezó el festín.
Minutos mas tarde mi esposa se quedo con el liguero, la faja, las media y sus calzoncitos negros que la hacían ver muy rica, como ella es rellenita esta ropa la hace ver muy vulgar, mientras yo le besaba el culo, ella empezó a sacar la verga de Lucho para mamarla, casi se desmaya cuando vio su tamaño, la verdad yo también quede sorprendido, yo había escuchado cuando estábamos en el colegio que era bien dotado pero no me imagine que tanto, después nos contó que su verga mide 23cm y es bien gruesa.
Mi esposa empezó a mamarla y yo no pude seguir haciendo nada me senté a observar el espectáculo, estaba súper arrecho jamás imagine que me excitaría tanto ver a mi esposa con otra verga en la boca, mamaba con unas ganas, ella también estaba muy caliente y se puso mucho mas cuando empecé a gritarle cosas, rico mamita mama esa vergota complace a tu cabrón marido, que rico mamas eso quería ver como te metías otra verga déjate dar por el culo con ese monstruo, seso pareció una orden por que Lucho se paro, empezó apretarle las nalgas mientras la besaba y sobaba las tetas, metió sus manos por entre los calzones y después de un rato de caricias me dijo con permiso, la puso de espalda sobre el brazo del mueble corrió sus calzones a un lado y empezó a sobarle la verga en el culo y la raja, Gloria pujaba duro y con ansias, la verdad es que yo estaba que me reventaba de la emoción sentí que la verga se me reventaba y estaba que me venia pero no quería hacerlo hasta disfrutar todo esto.
Le puse la verga en la boca a mi esposa y empecé a llenársela de leche cuando vi como centímetro a centímetro la vergota de Lucho llenaba la raja de mi esposa, la bombeo como por veinte minutos, luego la volteo, la abrió de piernas, le rasgo los calzones y continuo dándole verga, a la vez le apretaba las tetas y la besaba mientras me decía que rica esta como me gusta, nunca imagine que fuera tan rica, tantas veces me pajee soñando con esta culote y ahora lo tengo todo para mi, saco la verga y empezó a botar leche por borbotones sobre su cuerpo, le empapo toda la faja y el liguero.
Esa noche Lucho se quedo con nosotros, dormimos en la sala en una colchoneta los tres, se la culió cuatro veces y en la mañana nos bañamos todos tres ella con su s liguero y la faja, la clavamos en el baño.
Desde entonces Lucho se la culea cada que quiere, por lo menos una vez a la mes, cuando el viaja le tare ropa muy sexy de Estados Unidos, el la ayuda a vestir como una puta, la llevamos a sitios de intercambios de parejas, a cine, desde entonces mi esposa se volvió una puta insaciable y yo un cornudo feliz que goza viéndola ensartada en otras vergas.
La semana pasada la lleve a un cine en Bogotá y dos hombre se nos acercaron, los deje que la tocaran y le dieran dedo, ella los masturbo y los hizo venir, cuando llegamos al apartamento el celador se la culio en el parqueadero.
Yo le consigo vergas a mi esposa y organizo su ropa, los lugares, he puesto avisos en Internet, periódicos etc, hemos gozado mucho pero siempre cuidándonos para evitar enfermedades, siempre seleccionamos cuidadosamente los candidatos y ponemos nuestras reglas, somos serios decentes y respetuosos.
Me gustaría mucho conocer hombres cornudos y cabrones como yo que les guste compartir a sus esposas con otros, conocer historias reales de cómo la han compartido, por que nació esta inquietud y como fue la primera vez, rico poder conformar como un club o un sitio para compartir nuestras experiencias y otras posibilidades para compartir a nuestras esposas, así como amigos y hombre que se ofrezcan para culiarselas de manera sana y responsable.
Se que mi declaración y afirmación de ser cornudo generará la inquietud de muchos y no faltaran los atarbanes, patanes que no compartan esta posición u opción sexual, agradecería mucho que si eres una de esas personas te abstengas de responder o enviar correos desagradables compartiendo tu inconformidad sobre nuestra opción sexual y animo a quienes compartan nuestros gustos para aprender y crecer en el tema.