Relatos Eróticos Gays
Siendo un hombre, me convertí en una mujer sexual - Relato gay
Publicado por Omar el 15/12/2015
Mi nombre de mujer es Josefa, les voy a narrar lo que es real y me ha sucedido, soy de closet, carpintero de profesión, hago puertas y demás trabajos de carpintería junto a mi amor willan que tiene 19 años, huérfano y vive con su hermana que es casada, mi Taller es en mi casa pero hago algunos trabajos en departamentos u oficinas, tengo 33 años y desde los 30 me ha gustado vestirme de mujercita con la ropa de mi esposa, claro que ella lo sabe por qué es la que me incentivo a usar ropa de mujer.
Todo empezó como un juego inocente, en nuestras relaciones sexuales a mi mujer se le dio por cogerme las nalgas y con el devenir de los días me comenzó a meter el dedo a mi culito, le empecé a coger gusto porque sentía que me podía venir mejor. Un día por la mañana que iba a trabajar solo no encontré mi bermuda para trabajar y preguntando a mi esposa esta la había lavado y estaba húmedo, me dijo porque no usas mi short que está limpio, no tuve más opción y me pareció buena idea, al ponerme sentí una sensación rara porque me quedaba ajustado, felizmente era elástica, me sentía excitado y mi esposa que me miraba y reía
Le dije, ¿ que me queda feo?
No de maravilla me dijo, que bonito trasero tienes y tu cintura es curvadita, pareces una mujercita, me existe aún más y luego la lleve a la cama pero antes le pedí que me prestara el resto de su ropa para estar vestida completamente de mujer, ella accedió y hasta me maquillo, esto me empezó a gustar y hasta empecé a dormir con falda y bividi.
En mi mente se fue metiendo el cuerpo de una mujer y me sentía muy a gusto y ella no se hacía problemas ya que cuando estaba solo trabajando, me vestía de mujer y creo que lo hacía mejor que hombre.
Durante tres días fui de viaje a colocar unas puertas en una construcción y como tenia obras que entregar deje a mi ayudante avanzando, cuando llegue mi mujer me esperaba con una noticia, había visto a willan en el baño masturbándose, al inicio me hablo seria, pero como yo le tome como algo natural ella se tranquilizó, le dije que ya era joven y que seguramente necesitaba de una mujer para estar tranquilo, pero que como trabajaba y era pobre no podía conseguir una chica, en eso ella me dice, a mí me da mucha pena, si yo pudiera le haría probar para que esté tranquilo, dijo, oye te cuento que la tiene más grande y más gruesa que la tuya, pero la tuya es rica yo solo atine a quedarme callado y no se comentó más el asunto.
Hasta que un día en que nos tocó trabajar juntos, me encontraba yo con toda la calentura y pensando en vestirme de mujer, me decidí y me coloque solo el short que siempre usaba, comencé a trabajar, él se quedó mirando primero y no dijo nada, después cuando nos bromeamos, él me decía sao que rica hembra, y así nos bromeábamos, se me hizo costumbre colocarme short y top para trabajar cuando estaba con él, mi mujer no decía nada como si no sucediera nada.
El día en que me iba a convertir en mujer fuimos a trabajar en un departamento, el guardián venía a eso de las seis de la tarde para cuidar por la noche, a mí me habían dado la llave, colocamos la puerta como a eso de las 10 ya habíamos terminado yo estaba vestida con mi top y mi short, me di cuenta que el me miraba y de rato en rato se acomodaba su pantalón, hasta que dijo jefe cada día usted es más mujer, y rio, por qué me dices le pregunté, y dijo es que esa ropa le forma su cuerpo bonito, te gusta le dije, si dijo, tiene un bonito pompis, tócalo si quieres le dije, no me importo nada, me sentía ardiendo, y deseaba ser su mujer, me cogió el pompis y yo lleve mi mano hacia su pantalón, le desabroche la correa bajé la trusa y salió un riquísimo mazo, que le lleve a mi boca por primera vez, tenía un olorcito no se difícil de describir, al inicio no me gustó, pero luego me acostumbre, comencé a mamar su verga como loca, era muy rico, estoy completamente segura que nunca había tenido relaciones sexuales, ya que la telita de la cabeza de su verga no se hacía hacia atrás, ese día iba a desplumar a un pollito, su verga eliminaba un líquido gelatinoso y saladito, me acorde de mi mujer como me hacía y comencé a tragármelo toda hasta llegar al fondo aunque me ahogaba pero era rico, el solo cerraba sus ojos, yo perdí la vergüenza y lo miraba a su cara, él no decía nada, me di la vuelta, me saqué el short y el calzón que tenía y me coloque en cuatro, él se arrodillo e intento penetrarme, pero no entraba, resbalaba mucho, le cogí de la mano y le dije vamos abajo al cuarto del guardián, creo que llegamos muy rápido, él se sacó toda su ropa y yo también, porque quería sentir todo su cuerpo desnudo, nos acostamos y el monto encima mío, echados lleve mi mano a su verga y la dirigí a mi huequito que creo ya no se le puede llamar virgen porque mi mujer metía el dedo, pero estaba muy ajustado, tuvo que hacer varios esfuerzos para poder penetrarme hasta que entró, lo sentí muy claramente cuando me llego hasta adentro, le dije que si en algún momento sentía que se iba a venir que lo sacara, así comenzó suavemente a meter y sacar, al inicio solo lo sentía entrar y salir muy ajustado , hasta que llegó un momento en que mi cuerpo desesperadamente pedía más y más y comencé a hablar y le dije papito lindo rómpeme mi coño con fuerza hasta el fondo y el comenzó a moverse bruscamente, mi arrechura era tal, que le dije pídeme lo que tú quieras mi amor que yo te doy y él dijo que me des todos los días, todos los días seré tu mujer le dije tu harás lo que quieras conmigo y si quieres algún día te presto mi mujer para vivir los tres, le pareció una gran idea y dijo así tiene que ser, por fin yo me sentía una mujer completa, saboreaba su piel , su peso , le pedí que me besara y por primera vez sentí los labios de un hombre, mi hombre mi macho mi papito lindo mi primer esposo, me entregue en cuerpo y alma a él y empecé e moverme como una loca y le pedía más y más hasta que me vino por mi verguita que creo estaba flácida, no lo sé por qué solo sentí que me venía, era el clímax el momento más maravilloso de una mujer y grite de ricura en eso el también se quejó y se quedó muy dentro mío, luego vino la vergüenza, ambos nos quedamos callados, él no se movía encima de mí yo estaba relajada pero avergonzada, después de un rato se bajó, le dije anda lávate y él dijo porque y fue al baño, pensé y me dije voy a guardar su semen dentro mío lo más que pueda, me coloque mi calzón , luego mi short y encima mi pantalón , sentía como un temor o miedo, salimos callados con dirección a mi casa él se quedaba por el camino, antes de bajar de la moto taxi me dijo mañana venimos de nuevo aquí, no le dije, no sé pero no tenía ganas y estaba avergonzada, al siguiente día trabajamos callados en la casa, al tercer día me dijo te sigue gustando, y me entró la calentura nuevamente y le dije si entonces manda al mercado a tu señora, le di 20 soles a mi señora y le mandé al mercado a traer fruta, mientras nos quedamos a hacer el amor nuevamente, desde ese día, me entró un gran gusto por ser mujer y me entregaba a él todos los días a veces hasta tres veces al día, él era muy fogoso y yo también hasta ahora llevamos una vida de marido y yo la mujer, solo que ahora ya somos tres con todo mi mujer que les contaré después como entró en el trio, vivimos felices y tenemos nuestros hijos, y nadie lo sabe a veces los amigos dicen hoye tu hijo se parece a willan, y yo le tomo a broma pero sé que los demás son míos.
Por último les quiero decir que hoy soy mejor que mujer porque lo hago muy pero muy rico, quisiera probar la verga de otro hombre, soy de Perú, si es que hay alguien pero que no haya estado con otras o que no tenga ninguna enfermedad, estoy dispuesta a entregarme y hacerlo feliz como ninguna mujer lo ha hecho por favor en los comentarios déjenme su correo que yo me contacto contigo.