Relatos Eróticos Gays
Me vendi a un maduro casado en la prepa
Publicado por AleLiz el 05/11/2021
Esto me paso hace unos años, les contare de mí, me llamo Ale y vivo en la ciudad de México, desde muy chico fui muy curioso en cuento a la sexualidad, y desde pequeña edad me sentí atraído a chicos y chicas, pero siempre fui muy tímido, al cumplir 18 años estudiaba en una preparatoria de la ciudad, y debido a otras razones mis padres me descuidaban mucho y no estaban al pendiente de mí, era en ese momento delgado y de cabello largo, muy lampiño, y de un cuerpo y cara afeminados, de hecho buen trasero, incluso mi voz resultaba afeminada, aun cuando no tenia intenciones de verme así, en mi vida publica era hetero, pero en mi mente la curiosidad por tener sexo con hombres crecía más y más, incluso mi principal fantasía trataba de vender mi cuerpo con un hombre mayor, no porque necesitara el dinero, sino por la fantasía de ser usado por un macho fuerte y maduro, esas fantasías me hacían tocarme a diario pensando en chupar y ser cogido por una verga gruesa y dura, navegando entre mis fantasías descubrí los anuncios sexuales por internet, de ahí me di cuenta que habían chicos pidiendo dinero a hombres a cambio de sexo, y veía como aceptaban y lo conseguían.
Me excitaban tremendamente esos anuncios, y ver como pasaba todo eso tan cerca de mí, y tan a mi alcance, así que decidí escribir uno en una página llamada evisex, escribí algo como “Chico virgen busca un hombre maduro para sexo a cambio de dinero” o algo así, muy nervioso y comprobando a toda hora si obtenía respuesta, después de un día en mi prepa al comprobar me di cuenta de que había obtenido muchas respuestas, al parecer debido a ser virgen de mis nalgas, algunas propuestas sonaban bien, pero de partes lejanas, u otro que me ofrecía mucho dinero pero me daba mala espina, así, entre unas 10 respuestas vi la de un hombre llamado Luis que tenia 46 años en ese momento era casado y vivía cerca de mí, me proponía verme con el a una hora que resultaba adecuada a mi escuela, entonces lleno de nervios, acepte, me cito en su casa, así que me bañe ese día, Sali a la escuela y me desvié por el metro de la ciudad de México, hasta la estación Candelaria, ahí debía encontrarme con Luis, vendría con una camisa polo rayas blancas y azules horizontales, yo me describí, mi mochila y mi ropa, muerto de nervios por lo que estaba haciendo pero también de adrenalina y excitación, baje del vagón.
Casi de inmediato lo vi a distancia, me moví un poco aun nervioso, pero se me acerco y me pregunto si era yo Ale, le dije que sí y me pidió que lo siguiera, fui detrás suyo y salimos caminando hacia su departamento, me pidió desviarnos para evitar a sus amigos, y llegamos a un edificio, subimos a un nivel superior y entramos a su casa, estaba solo, era casado y con una hija de mi edad, pero no se encontrarían en muchas horas, me mostro la computadora donde me conecto, me ofreció agua y me dio un bote de crema, esta decía lubricante anal, me lo puse como me dijo, y lleno de nervios y calentura me pregunto de si estaba seguro debido a mi edad, y si realmente lo hacía por dinero, le dije a Luis que estaba bien, que lo hacía solo porque me gustaba el dinero(que no era cierto jeje), y nos sentamos en su sala.
Aquí me pidió que me quitara la ropa, obedecí y comencé a desnudarme, el hizo lo mismo y vi su pene mientras me quitaba mi playera, era oscuro y estaba flácido aun, pero se notaba de buen tamaño, un poco grueso, me quede babeando mientras lo veía y me terminaba de quitar hasta los calcetines, así quede hincado en el piso sin nada y el sin nada tampoco masajeando su pene sentado en el sillón, me dijo
– Ven y chúpamela
Así de rodillas gatee hacia el y tome su pene entre mis mano, empecé a masturbarlo, y empecé a chupárselo, me encanto mucho la textura, el sabor, forma de un pene que por primera vez estaba comiéndome, lamiéndolo, y succionando con los labios, recordando mis películas porno, estaba ahí, de rodillas desnudo chupándole la verga a un hombre de 46 años sentado en un sillón, y me encantaba, y a él también a decir por su mirada al verme devorando a chupadas su verga ya tiesa, a los minutos de saborearla me tomo de mi cabello y empezó a obligarme a metérmela mas en el fondo de mi garganta, que me hizo dar arcadas, pero el no paro, y siguió haciéndome chupársela, después de seguir un poco mas me aparto de ella, y entendí que era el momento de perder mi virginidad.
Me sentó sobre el sillón a cuatro patas, y de reojo vi como masajeaba su pene y al mismo tiempo tocaba mi ano, después me abrió mis nalgas y lo vi acercase a mí, estaba explotando de excitación, así sentí su pene haciendo presión entre mis nalgas, poco a poco fui sintiendo ese pedazo de carne entrando dentro mío, me dolió, me dolía y aunque trate de aguantar mordiendo el borde del sillón donde me puso, Luis lo noto, y me dijo que si me dolía demasiado podía seguírsela chupando, hasta sacarle la leche, yo le dije que lo soportaba, que deseaba que me la metiera, eso le encanto al parecer, porque tomo mis caderas y de forma mas decidida me empujo su verga entre mis nalgas y este finalmente de un empujoncito entro hasta mi ser, di un leve pujido y abrí bien mis ojos y seguramente hice una cara de placer, me encanto esa sensación, por fin tenia esa verga dentro de mí, así quedamos unos segundos juntos, y a esos segundos empezó a meterla y a sacarla, lentamente sentía como tallaba mi ano con esa verga gruesa, después empezó a subir la velocidad hasta estrellar mi cara contra el respaldo de ese sillón, y me apretaba mas duro mis cadera y a veces masajeando mis rojas nalgas, mientras más me daba empecé a sentir sensaciones que me encantaron, mientras él y yo seguíamos cogiendo en su sillón sonaba el típico sonido de “aplausos” y eso me llenaba de placer y excitación, finalmente… empezó a gemir mas fuerte y me tomo con mas fuerza, deteniendo su mete y saca… me había llenado de semen mi cola, se quedo quieto metiendo su verga en lo mas hondo que pudo… y después la saco lentamente y cayo sentado en el sillón, yo solo me quede quieto en 4 patas y con el culo lleno de semen, me fascinó…
Y solo así me di cuenta de que no había usado condón, pero no me importo en ese momento, el salió al baño y me trajo papel, me enderecé y me empecé a vestir, al igual que el, entonces saco de su cartera miseros 200 pesos, y me dijo que era lo que podía darme, y que podríamos hacerlo más veces, le agradecí y me invito a quedarme, cosa que no pude porque tenía clases, así me despedí de él, me fui con una gran sonrisa…
Cuando llegue a mi escuela pase al baño y me di cuenta de que tenia mi ano lleno de su semen, eso me encanto, había conseguido mi sueño, me fascinó.
Debido a problemas no pude volver a verlo… pero hoy día sin duda me le entregaría de nuevo, el se fue a vivir a otro estado cercano, ya jubilado, así que si algún día lo vuelvo a encontrar me encantaría eso.
Contáctame Luis! Xocoyotzin1996@gmail.com